lunes, 27 de julio de 2015

Parte 15: Encontré Lemuria, primer camino de lágrimas








Suzanne Lie
South Bay, California, USA.
24 de julio, 2012.
http://suzanneliephd.blogspot.com






SUZANNE LIE:

Estoy llamando a mi SER a asistirme en recordar el asombroso viaje meditacional que acabo de tener.

Después de estar completado, me enrollé en posición fetal y fui a dormir o a meditar, lo cual no recuerdo.

Estoy lista finalmente para documentar mi experiencia.

Fue una experiencia “real” por los estándares de mi Portal Pineal, así como por la experiencia de mi Portal del Corazón Superior.


Querido Mytra, puedes ayudarme a entender más sobre mi experiencia?


MYTRA:

Te asistiré feliz, querida expresión en tierra, de nuestro SER Multidimensional.

Fuiste preparada para hacer éste viaje, al escuchar, “el Camino de las Lágrimas”, una y otra vez, en tu mente.

Sin embargo, tu mensaje fue sobre el primer Camino de Lágrimas.

El segundo Camino de Lágrimas, fue, cuando los Atlantes, los blancos, de naciones Europeas, de los Hermanos de Biel, de Atlántida, conquistaron de nuevo a los Lemurianos, en su forma moderna, a los Nativos Americanos.


En el primer Camino de Lágrimas, los Lemurianos supieron que los Hermanos Atlantes de Biel los derrotarían, y ellos tenían que encontrar refugio.

Muchos de ellos miraron a lo que es hoy el Noroeste Americano, comenzando por las Islas Santa Bárbara, en la costa media de California, donde había un elevado pico, Monte Shasta, en el norte de California, y Monte Rainier, en el estado de Washington.

Algunos Lemurianos vivieron en los picos de las islas de Santa Bárbara.

Estas islas eran montañas entonces, y se volvieron bajas, luego del hundimiento de Lemuria.

Los Lemurianos vivieron allí, hasta que los Hermanos de Biel, conocidos en tiempos recientes como los Illuminatis, los descubrieron, y los sacaron de su hogar, en las islas.

Al final de un año, todos murieron.

Sin su amada tierra, y sin su libertad de Espíritu, no había razón para vivir.

Otros grupos decidieron que ir debajo de la tierra, era más seguro.

Estaban en lo correcto, porque, no sólo sobrevivieron, sino que ascendieron, a una sociedad superior tetra/penta dimensional.

Los Lemurianos sabían que los picos montañosos volcánicos eran áreas de la Tierra que servían como la Glándula Pineal de la Madre.

Los Lemurianos también supieron que éstas Glándulas Pineales Planetarias estaban conectadas, y alimentaban el Corazón Superior Planetario, en el Centro de la Madre Tierra.

Por lo tanto, si los Lemurianos podían vivir debajo de los picos montañosos, podían vivir dentro del Corazón Superior de la Madre.

La Glándula Pineal, en sus cuerpos físicos, sirve como un corta fuegos, para proteger el Corazón Superior, de cualquier forma de oscuridad o miedo.

También sirve como un Portal, a través del cual, la luz superior y el amor incondicional pueden ser bajados, a su cuerpo físico.

Las Glándulas Pineales Planetarias sirven a la Madre de la misma manera, en la cual, la Glándula Pineal personal les sirve a ustedes.

Sin embargo, desde que Gaia está vistiendo su forma de planeta, ella requiere más de un Corazón Superior, y más de una Glándula Pineal.

Algunas de sus Glándulas Pineales han sido bloqueadas, por la oscuridad de los humanos, que viven en su superficie, pero algunas aún están abiertas.

Los Lemurianos tenían dos razones para elegir que su hogar fuera debajo de los picos montañosos.

Una, que ellos sabían que podían encontrar seguridad en el Corazón Superior de la Madre.

Dos, que ellos sabían que si ocupaban el Corazón Superior de la Madre esto les serviría para mantener la Glándula Pineal sobre ellos clara.

La Glándula Pineal sirve al Corazón Superior enviando su luz multidimensional y amor incondicional.

En retorno, el Corazón Superior protege a la Glándula Pineal, enviando, en Lenguaje de Luz, mensajes de la luz multidimensional, y el amor incondicional, incrustados en la más alta frecuencia de esa luz.

El Corazón Superior de la Madre también envía su mensaje, de amor incondicional y luz superior, a la Tierra, alrededor de la montaña.

Los Nativos Americanos le han siempre rezado a los picos montañosos, porque ellos podían sentir el inmenso amor emanando, desde esos picos.

Ellos también pueden sentir a la Madre, debajo de ellos, en todas los suelos y aguas, alrededor de los picos.

Afortunadamente, aún, los emigrantes de América han sentido su amor, y han creado Parques Nacionales, y han protegido áreas, alrededor, de muchas de las Glándulas Pineales de la Madre.

También, muchos humanos vienen a éstos picos, porque pueden sentir el amor.

Ellos a menudo, inconscientemente, sienten el amor, y creen que sólo se sienten bien, porque se ejercitan, o porque están de vacaciones.

Ya que Lemuria estaba en el Océano Pacífico, los Lemurianos hicieron hogares bajo tierra, debajo de los altos picos montañosos, que son las Glándulas Pineales de Norte y Sudamérica, Australia, Nueva Zelanda, y lo que quedó de su tierra, como Hawaii y Polinesia.

De hecho, todo “nativo” que cree que sus Ancestros vinieron “desde abajo de la tierra”.

Ellos son descendientes de los Lemurianos, que vivieron debajo de la Tierra, durante la destrucción de su hogar.

Ya que los Lemurianos tomaron refugio, debajo de los picos, en las áreas, alrededor del Océano Pacífico, ellos fueron creando, una enorme cantidad de túneles, debajo de la tierra.

Viajando, a través de esos túneles, fueron capaces de entrar en la Tierra, desde diferentes áreas.

Ellos podían viajar a través de esos túneles, casi a la velocidad de la luz.

Aquellos que vinieron a la Tierra, más temprano, se adaptaron a las condiciones del área, vía pigmentación de su piel, tipo de pelo, tamaño de su cuerpo, etc.

También, los ascendidos, Lemurianos pentadimensionales, pueden teletransportar sus formas, a cualquier área, que quieran visitar.

Así como los ancestros Lemurianos, fueron conquistados y dominados, por los ancestros Atlantes, los Lemurianos descendientes, de hoy en día, han sido conquistados y dominados, por los actuales Atlantes.

Primariamente, por los descendientes de los Hijos de Biel, ahora, por los Illuminati.

“En el comienzo”, cuando la Tierra estaba lista, para su presente ronda de encarnaciones, dos seres primarios, tenían que sostener las polaridades, masculina y femenina, para fomentar la extrema polaridad, de la dualidad, para éste ciclo.

Los representantes de la Madre, los Lemurianos, vinieron primero.

Luego, los representantes del Padre, los Atlantes, llegaron después.

Los Lemurianos estaban para servir, a la polaridad femenina, y los Atlantes para servir, a la polaridad masculina.

Los Lemurianos estaban muy enfocados en su corazón, ya que serían una raza nueva, de gente de la Madre.

Ellos prometieron, así como todos los Nativos Americanos lo han hecho, ser los Guardianes de la Tierra.

Su servicio fue mantener a Gaia firme y saludable.

Lemuria estaba en una enorme masa de tierra, la cual es llamada hoy, Océano Pacífico, y Atlántida estaba en una enorme masa de tierra, en lo que hoy es conocido como Océano Atlántico.

Los Lemurianos, basados en lo femenino, se enfocaban en vivir como UNO, con el planeta, y representaban al Corazón Superior, del Chakra Corazón.

Contrariamente, los Atlantes, la polaridad masculina, se enfocaban en traer la luz superior, de las nuevas ideas y el crecimiento mental, como la Glándula Pineal, del Chakra Corona.

Por lo tanto, las polaridades, femenina y masculina, vivieron en paz y amor, durante muchos milenios.

Desafortunadamente, el plan original fue corrompido, por la llegada de Seres, de otro mundo.

Estos Seres eran "los Renegados", quienes no fueron capaces de ascender, en su Hogar, porque no pudieron aprender a vivir en amor.

Estos "Renegados" eran como los conquistadores, que vinieron a América, eran inmensamente avanzados, tecnológicamente, más que las Gentes Nativas.

Vinieron a la Atlántida, en vez que a Lemuria, porque eran más basados en la mente, como lo eran ellos.

Al comienzo, los Atlantes estaban muy felices, de tener ésta nueva información, que era abiertamente compartida con ellos.

Así que, cayeron en las muchas trampas, que fueron puestas por "los Renegados".

"Los Renegados"s eran un grupo de rufianes, de diferentes planetas, y sistemas estelares, que se habían juntado, porque no fueron capaces de Ascender, con sus Civilizaciones.

Esta es la razón, por la que hay tanta confusión, sobre quién comenzó la caída de la Tierra, a la baja densidad, de la tercera dimensión.

No entraremos en la caída de Atlántida, pero diremos, que esos "Renegados", se volvieron los Hijos de Biel, las Oscuras Vestiduras de Atlántida.

Ellos se han estado escondiendo, en la oscuridad, desde entonces.

Fueron responsables, primero, por la caída de Lemuria, luego, por la caída de la Atlántida, y por todos los innumerables actos viles, de su grupo actual, conocido como, los Illuminati.

En otras palabras, ellos fueron los representantes del “Lado Oscuro”, desde que vinieron a la Tierra.

De hecho, estos "Renegados" intentaron parar, la Ascensión en su hogar, lo cual es, por lo que no ascendieron.

Sin embargo, es importante recordar que, todos los mundos polarizados tienen, “chicos buenos” y “chicos malos”, para que se pueda mantener esa realidad activa, en la tercera dimensión.

Desafortunadamente, éstos grupos no sólo fueron físicos, porque también eligieron, mantener, una forma, en el Plano Bajo Astral.

Afortunadamente, la Federación Galáctica, ha llegado para asistir, finalmente, en la retirada de "los Renegados", en sus muchas formas, en la Galaxia entera.

De hecho, hay muchos miembros, de nuestra Federación Galáctica, que han elegido, vestir, una forma tridimensional en éste “tiempo”, de manera que puedan ayudar a Gaia, ya que ella los ayudó antes.

Muchos, sino la mayoría de la gente, que es llamada por ésta información, tiene Expresiones Superiores de sus SERES, en la Federación Galáctica.

La Federación ha venido a asistir a sus descendientes, y expresiones en la Tierra, pero están, primariamente aquí, para asistir a Gaia.

Gaia les ofreció antes, Su Tierra, como un lugar para aprender, crecer, y hasta Ascender.

Más aún, los Lemurianos vendrán a la superficie, cuando los Galácticos bajen, y los Celestiales llenen los cielos.

Todos los humanos terrestres, pasados, presentes y futuros, se unirán como UNO, para abrazar, el más grande evento, de Ascensión Planetaria.





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